ACERCARSE A LOS CETÁCEOS

- Los cetáceos deben aproximarse a una velocidad no superior a 5 nudos y en un ángulo de aproximadamente 30° con respecto a la dirección de movimiento de los animales. La embarcación no debe acercarse a los mamíferos marinos a menos de 100 metros y debe alejarse inmediatamente si se observa un cambio de actitud, velocidad o comportamiento de los animales.

- El barco nunca debe acercarse por delante, por detrás o perpendicularmente a la dirección de movimiento de los cetáceos. La aproximación debe ser suave y paralela al grupo observado.

- Se prohíbe el uso de sonares o instrumentos del tipo "buscador de peces" para localizar animales, ya que estos instrumentos emiten frecuencias que interfieren en la comunicación de los animales entre sí.

- Durante la observación, la embarcación debe mantenerse a una velocidad constante en dirección paralela al movimiento de los animales. La velocidad máxima nunca debe ser superior a la del animal más lento del grupo.

- Si una ballena se acerca a la embarcación o aparece de repente a menos de 60 metros de ella, hay que poner punto muerto. En el caso de los delfines, se puede mantener una velocidad lenta y constante.

- Está prohibido acercarse y observar una "guardería", es decir, un grupo de bebés o menores supervisados por unos pocos adultos.

- La persecución de cetáceos durante una cacería está prohibida.

- Se prohíbe perturbar los grupos de superficie activa durante el apareamiento.

- No se puede observar el mismo grupo de cetáceos durante más de 45 minutos.

- Debe evitarse cualquier cambio brusco de dirección o de velocidad durante la observación. Los animales estarán más tranquilos si la embarcación mantiene una velocidad constante.

Carta para acercarse a los cetáceos, elaborada por el Proyecto Ballena de Shelltone.